Minatitleco

Desde Minatitlan, Jaltipan Coatzacoalcos ,Cosoleacaque y demas poblados vecinos del estado de Veracruz se edita este higuereño

jueves, 5 de junio de 2008

REMEDIO MATERNO EN MOCORITO


COSAS QUE PASAN

Los plebes ya tenían 8 años el mayor-Cristino-y 6 su hermano-Afra-.Andaban descalzos , mas por comodidad que por falta de huaraches,. Huaraches tenían, elaborados en casa con baqueta de vaca y correones de el mismo cuero, Chacho su papá los hacia en menos de que canta un gallo, Con su trucha, su alezna, martillo y puntillas se armaba. Ponían el pié los plebes en la superficie de la baqueta y lo marcaba con la misma alezna para cortar diestramente con la trucha. a veces para que la suela fuera mas gruesa y resistente , le ponía hule de llantas viejas. Apoyado en la piedra de amolar, martillaba hasta terminar los huaraches que quedaban formados como los que ahora llaman pata de gallo y son tan populares y dan tremendas rasquiñas en los pies, pues son de plástico y vulcanizados con un producto químico llamado hidroquinona- esta sustancia es la causante de dermatitis de contacto que después de la quemada en los pies deja manchas blancas como el vitíligo-.Guaraches de tres piquetes o tres puntadas, les llamaban.
El andar descalzo formó en la planta de los pies de los plebes, gran callosidad que les defendía de la temperatura de la tierra y hasta de algunas espinas, que a pesar de que estaban alojadas en la planta no llegaban a causar dolor.
Ese día salieron al cerco a cambiar las bestias-mulas que usaban en la labor arando- y como siempre,se fueron descalzos, montados en el viejo burro que habían agarrado en el basurero de la localidad- era el único que se dejaba agarrar por los plebes , ya que los demás eran muy briosos y ariscos y nomas miraban que alguien se acercaba con mecate en mano , estos emprendían loca carrera que ni andando a caballo los alcanzaban – . En el viejo burro bonchi- porque le habían cortado la cola de un machetazo en sus tiempos mozos, cuando tenía gran energía y no lo habían capado, en esos tiempos el burro era mañoso y cerquero y como condecoración le quedó la cola mocha y la oreja gacha.
Caminaron por “la punta de la carrera” se bajaron en la entrada , abrieron la puerta de alambre y amarraron el burro nomás entrando, se fueron caminando por la tabla de la bambarria , pasaron el güinolar caído –pues habían desmontado recientemente- y ahí sintió Cristino que algo le había picado, cuando buscó a ver que era se arrimó gran susto pues al lado de donde había pisado y sentido el piquete , estaba tremendo escorpión- lagarto de Gila- con su hocico babeante y levantándose haciendo lagartijas como queriendo pelear, Sabiendo que estos animales son muy difíciles de matar- por lo menos a pedradas pues son muy aguantadores y duros, optaron por alejarse corriendo y a pesar de la molestia en el pié lo hizo con agilidad. Regresaron sin más incidentes, pero ya en casa se revisó a conciencia, limpiando la planta del pie y fue cuando alcanzo a ver una espina como de un centímetro que se encontraba incrustada en la callosidad y algo mas profunda. Por lo profundo y la dimensión de la espina corrió con la Chaga –su mamá –para que le hiciera el infalible remedio saca espinas-este consistía en dejar caer la cera de una vela encendida, en el área donde estaba la espina, dormía así toda la noche e invariablemente al día siguiente se aparecía la ampolla de la quemada expulsando el objeto extraño de una forma segura. “Espérate a que este acostado”-le dijo la Chaga, porque no vas a sentir y así no me pateas. Por la noche ya estando dormido Cristino, la Chaga procedió a la curación, sabía que era el talón del pie izquierdo , se agachó en el viejo catre de jarcia donde dormía y sin vacilación tomó el pie y dejo caer la cera en el área afectada sin que el plebe se moviera siquiera.
Al día siguiente al revisar la quemada, no se aguantó y pegó tremendo grito que sorprendió a todos en la casa.¡ Amá me quemaste el pie que no tenía nada!, efectivamente así fue , lo que pasó es que en la noche Cristino dormía boca abajo , la Chaga agarró el pie que ella creyó era el izquierdo ,pero no lo fue. A la noche siguiente le quemaron el correcto y la cosa no pasó a mayores.

1 comentario:

Anónimo dijo...

escriba mas cosas acerca de la higueras de los vega estan bonitas las historias